La segunda semana de la pretemporada de la NFL volvió a dejar claro que agosto está lejos de ser un simple trámite. Novatos que se ganan su espacio, equipos que empiezan a enseñar sus cartas y defensivas que encienden alarmas fueron los grandes titulares de una jornada vibrante.

En Nueva York, los Giants se llevaron el clásico de pretemporada frente a los Jets, impulsados por la seguridad y madurez de Jaxson Dart. El mariscal novato completó 14 de 16 pases, aportó dos touchdowns (uno por aire y otro por tierra) y consolidó la idea de que puede ser parte del futuro inmediato del equipo. La defensa también respondió, con una intercepción clave que selló el triunfo.

En el Monday Night Football, los Bengals doblegaron 31-17 a los Commanders, con un sello defensivo: dos intercepciones que se transformaron en puntos. Aun así, Washington encontró esperanza en el juego terrestre, donde Chris Rodríguez Jr. y el novato Bill Croskey-Merritt sumaron más de 100 yardas combinadas.

Para Cincinnati, la nota positiva también llegó desde los equipos especiales, con el regreso del pateador Evan McPherson y un gol de campo de 54 yardas.

Seattle vivió una noche inspirada frente a los Chiefs. Jake Bobo brilló con dos recepciones de touchdown, mientras que el ataque terrestre de los Seahawks acumuló 268 yardas. Kansas City, en cambio, mostró serias grietas defensivas y sufrió además una conmoción en uno de sus novatos.

En Jacksonville, el empate 17-17 entre Saints y Jaguars dejó buenas y malas noticias. La positiva: «La solidez del novato Kelvin Banks Jr., quien no permitió presiones en todo el partido. La negativa: «La defensa de Nueva Orleans volvió a exhibir el mismo problema que la temporada pasada, con nueve tacleos fallados que costaron caro»

Los Bears dieron el golpe más contundente con un 38-0 frente a los Bills. Caleb Williams lideró una ofensiva precisa y explosiva, guiando un drive de 93 yardas en la primera serie. La defensa acompañó con un nivel dominante que dejó sin respuesta a Buffalo.

La semana también entregó destellos individuales que empiezan a hacer ruido: Dillon Gabriel, con 143 yardas para Cleveland, alimentó el debate sobre su rol; y en Philadelphia, el safety novato Andrew Mukuba firmó una actuación brillante con una intercepción de 75 yardas para touchdown y un fumble forzado, colocándose como fuerte candidato a ser titular.

En definitiva, esta segunda semana confirmó que la pretemporada es mucho más que un banco de pruebas: es un escenario donde emergen nuevas figuras, se fortalecen proyectos y se encienden las primeras alarmas. Los entrenadores afinan esquemas, los jóvenes piden paso y el espectáculo, incluso en agosto, sigue siendo marca registrada de la NFL.