Gracias a los golazos de Éder Militao y de Kilian Mbappé, los blancos ganan por 2-0 y consiguen 15/15 puntos que los mantienen como líderes de esta liga. El Espanyol sufre su primera derrota de la temporada en un partido con muchas ganas pero poca eficacia.

El Santiago Bernabéu fue testigo de unos primeros minutos muy intensos, que después se irían diluyendo con el pasar de los minutos. El primer aviso del partido llegó por parte del conjunto perico: un disparo tempranero de Expósito que obligó a Thibaut Courtois a intervenir con seguridad. Respondió rápidamente el Madrid con una carrera peligrosa de Carreras, que terminó en remate contenido por Dmitrovic. Avisos y tanteos sin daños mayores.

El planteamiento del Xabi Alonso dejaba entrever un dibujo diferente al que estamos acostumbrados. Vinícius Jr. y Mastantuono ocupaban las bandas, mientras que Mbappé descendía con inteligencia entre líneas sin invadir zonas ajenas. Gonzalo, más estático, ejercía de ‘9’ clásico en su debut liguero como titular. Todo esto sin Arda en el medio del campo. Enfrente, el Espanyol mantenía su disciplina, ordenado y sin concesiones.

Carreras cometió un error comprometido en una salida, perdiendo un balón en zona peligrosa, pero su rápida reacción permitió recuperar sin cometer falta y evitar el peligro. Fue uno de los tantos duelos individuales que marcaron el ritmo del lateral, que los resolvía positivamente.

Uno de los más destacados en el conjunto blanco fue el joven Mastantuono, omnipresente en tareas defensivas y ofensivas. Robos en ambas áreas, intensidad y despliegue físico para sostener al equipo en momentos de poca claridad creativa. Un verdadero pulmón.

El Espanyol, lejos de meterse atrás, intentó romper líneas con contragolpes eléctricos. Edu Expósito, Puado y Roberto fueron las principales amenazas para los merengues. La zaga madridista, con Militao, Asencio y Carreras muy atentos, supo responder con coberturas acertadas. Aun así, Tchouaméni tuvo que recurrir a una falta táctica para frenar una contra peligrosa (la forma en la que el Espanyol hacía mas daño), lo que le costó la primera amarilla del encuentro.

Cuando el ritmo parecía reducirse muchísimo y el partido se inclinaba hacia un descanso sin movimiento en el marcador, emergió Éder Militao. El central brasileño, más de un año después sin ver portería, aprovechó un balón que recibió en la frontal para sacar su magia. En tres cuartos de cancha, levantó la cabeza y soltó un derechazo seco, violento, que se clavó en la escuadra derecha de Dmitrovic, que llegó a tocarla, pero no pudo evitar que se metiera en la red. 1-0 para el Real Madrid, justo cuando el reloj marcaba la calma.

Vinícius, por su parte, tuvo una primera mitad apagada. Lejos de su mejor versión, no estuvo fino en los duelos individuales ni en la presión. Solo al borde del descanso dejó una acción para el recuerdo: autopase eléctrico para dejar atrás a El-Hilali y conducir un contragolpe de tres contra uno. Sin embargo, su pase final a Mbappé fue desperdiciado por el francés, que mandó el balón fuera. Mastantuono, mejor posicionado, reclamó sin levantar la voz.

Pero el Espanyol aún tuvo una más: un centro preciso de Expósito en balón parado que Calero rozó sin llegar a concretar. Fue la última amenaza antes del descanso.

Con todo, partido trabado, con más intención que acierto. El Real Madrid iba delante por el golazo de Militao, pero el Espanyol demostró que no vino a rendirse.

SEGUNDA PARTE

El segundo acto tuvo un omienzo muy similar al del primero. Intentó crear peligro el Espanyol de la mano de Puado pero estuvo muy atento Carvajal para evitar los desplazamientos del ‘7‘.

Justo escasos segundos después y con aficionados todavía regresando a sus butacas, recibe el balón Mbappé fuera del área y con un derechazo al primer palo, batió a Dmitrovic poniendo el segundo gol en el luminoso para los locales. Quizá pudo hacer mas el meta serbio.

Tras este segundo gol el Madrid se adueñó del encuentro de una forma no antes vista en el partido, haciéndose sentir en la actitud de los jugadores blancos, que querían aprovechar el bajón del Espanyol para hacer mas daño.

A pesar de los arreones blancos tras el segundo, los catalanes no se vinieron abajo e intentaban jugar mucho por la banda izquierda, apoyándose continuamente en Puado, que sin duda era quién mas peligro generaba de los hombres de Manolo González. Puso un buen centro Edu Expósito en un saque de libre directo pero no llegó Cabrera al remate.

Un asombroso Carreras aguantaba perfectamente las intenciones de Dolan y solía robar el balón con mucha maestría. No estaba aprovechando el Espanyol las ocasiones que estaban teniendo y eso le afectaba a Manolo González, que estaba muy activo en la banda.

El primer cambio del partido lo realizó el Real Madrid en el minuto 60′ dándole entrada a Arda Güler por Gonzalo, que a pesar de hacer un buen partido, no destacó por encima de sus compañeros.

Minutos después, hubo triple cambio en el Espanyol. Expósito, Pol Lozano, y Dolan salieron por Jofre, Pickel y Koleosho. Buscaba darle un cambio al partido Manolo González, aunque algunos le achacaron la retirada de tres jugadores de ataque cuando el equipo iba perdiendo.

Continuaba el Madrid asediando la portería perica pero entre Dmitrovic, el palo, y la defensa perica repelieron los disparos de Mbappé y Vinícius. Estaba mas cerca el 3-0 que el 2-1.

Mastantuono vería una cartulina amarilla tras golpear con su bota la cabeza de Carlos Romero. Levantó mucho la pierna el argentino para disputar un balón aéreo y acabó chocado con la testa del defensor, que salía de la acción sangrando con una brecha en la frente. El árbitro interpretó que era un lance del juego involuntario y únicamente mostró la amarilla. Hubo muchísima queja de los aficionados espanyolistas desplazados a Madrid con esta decisión. Y con razón, podría haber sido tarjeta roja perfectamente por el juego peligroso.

A pesar del resultado adverso, el Espanyol continuaba intentándolo y rascando varias acciones a balón parado en el lateral del área. Sin embargo, no lograban dar con la tecla clave para sacar rédito de sus acciones.

Obviando el resto de cambios por ambos equipos, poco mas sucedería en los últimos minutos del encuentro y el resultado final sería una representación justa de lo vivido en el campo. El Espanyol tuvo ocasiones y gozó de buenas oportunidades, pero no pudieron materializarlas. Ya sea por el buen hacer de la defensa blanca o porque los jugadores pericos no estuvieron acertados de cara a puerta, no tuvieron ninguna opción clarísima de marcar.

Los de Manolo González regresan a Barcelona sabiendo que podrían haber hecho más pero no ha sido así. Gracias a los golazos de Militao y Mbappé la victoria se la ha llevado el Madrid, pero el Espanyol se plantó bien en el campo y dejó cosas muy positivas a pesar de la derrota. Intentaron los pericos pelear, pero la pegada y el talento individual de los blancos acabó siendo lo que desequilibró la balanza a favor de los locales.

El próximo encuentro de los catalanes será en casa contra el Valencia CF el martes 23 de Septiembre a las 19:00. A falta de lo que hagan el resto de equipos este fin de semana, los pericos se sitúan en tercera posición con 10 puntos de 15 posibles. Un grandísimo arranque de los de Manolo González que no deben venirse abajo por esta derrota. Hay que seguir.

En cuánto al Real Madrid, se verán las caras contra la U.D. Levante en Ciutat de Valencia el martes 23 de Septiembre a las 21:00.