El técnico franjirojo expresó la importancia de continuar en la senda positiva que actualmente posee el equipo, puesto que mañana se las verán contra un Real Oviedo que, a pesar de ser último en la clasificación y contar con un nuevo entrenador, irá a por todas en su estadio.

Íñigo Pérez atendió esta mañana a los medios de comunicación en la previa del encuentro del Rayo Vallecano frente al Real Oviedo, que tendrá lugar mañana domingo 23 de noviembre en el Carlos Tartiere.

Como siempre, el técnico navarro habló sin tapujos y expresó si visión de conceptos relacionados a la actualidad del club vallecano: desde las últimas lesiones y renovaciones hasta la dificultad emocional que supone visitar a un rival en una situación y con una afición exigente.

Un partido con muchísima exigencia mental

Íñigo Pérez se mostró sincero y cauteloso, definiendo el duelo de mañana como un partido que exigirá mucha concentración y fortaleza emocional por la situación actual del equipo asturiano. La afición local estará ahí para animar a su equipo en este momento complicado y el Rayo debe estar atento:

“La afición del Oviedo es fiel y exigente, así que mañana, a nivel emocional, tenemos que estar preparados para un ambiente de los que gustan. No va a haber ni un segundo en el que la gente del Oviedo no esté con sus jugadores.”

Se suma a ello la ‘reciente’ incorporación del nuevo técnico del Oviedo, Luis Carrión, con el cual Íñigo mostró su afecto y entendimiento. Él sabe lo que es iniciar con el campeonato ya empezado y dió muestras de cariño y respeto:

“Está en proceso de mantener lo bueno e implementar lo que él sienta. Conoce el contexto, tiene experiencia y calidad. Seguro que sale adelante.”

Hablando del estilo del rival, destacó su valentía y calidad individual:

“Defensivamente notaremos su frecuencia emocional. No veo a un Oviedo que nos vaya a esperar en su área. Quieren balón, tienen jugadores diferenciales y son valientes.”

Puntuar mañana, importancia total

El técnico recordó que el encuentro ante el Oviedo es crucial puesto a que viene después de un parón internacional y además representa el primer partido del bloque liguero previo al parón navideño:

“Es el último bloque antes del parón por Navidad. Hay que seguir con la inercia que traemos en las tres competiciones. La temporada es eterna y queda mucho, pero lo importante es mañana.”

Insistió en mantener la concentración en el día a día, sin fijar metas temporales:

“Yo no me pongo metas temporales. Me enfoco en las semanas, que son muy cortas, y trato de gestionar a los jugadores desde la cercanía y el entendimiento.”

Por eso es que Íñigo dejó claro que el Rayo no viaja al Tartiere a especular, quiere volver a casa con el +3 y seguir en un estado de ánimo y juego positivo:

“Mañana es un partido importante y vamos con la máxima ambición. El rival será duro, pero estamos preparados para afrontarlo.”

Conocido en la élite europea

Últimamente Íñigo es de los entrenadores de moda en el futbol de élite. Su trabajo en el Rayo no ha pasado desapercibido y se le ha vinculado con algún que otro club de la élite del viejo continente estos meses. Al ser preguntado si este es «El Rayo de Íñigo Pérez«, se mostró claro y conciso, reforzando el papel de su cuerpo técnico al completo.

“No es el Rayo de Íñigo. Ese discurso va mal a la larga. Hay que poner en valor el peso del staff técnico. No solo es ganar o perder, es con quién lo haces.”

Sobre el ruido externo del interés de otros clubes, también se mostró contundente:

“Lo único que me interesa es el Rayo y mi plantilla. No dejo que mi cabeza recorra esos caminos porque no hay certezas.”

Renovaciones y lesiones

La noticia más destacada de la semana fue la renovación de Andrei Ratiu hasta 2030. Pérez destacó el mérito del lateral y su progresión temporada tras temporada como motivo para su ampliación de contrato:

“Es una noticia muy buena para todo el equipo, principalmente para él, porque consigue algo a raíz de su mérito y buen hacer en el campo. Cada temporada ha ido incrementando su nivel. Es bueno que eso se valore.”

El técnico también explicó por qué el Rayo ha logrado retener a jugadores tentados por otros clubes, siendo clave la felicidad y la comodidad en este tipo de decisiones:

“La retención de estos jugadores creo que se debe a que están contentos en el club. Les gusta la gente con la que trabajan, les gusta la propuesta, están contentos con la ciudad. Es más sencillo de lo que parece.”

Sobre las lesiones, confirmó que Alemao estará disponible tras superar unas molestias en el aductor estos días:

“Hemos tenido el percance de Alemao, que tuvo una pequeña molestia en el aductor. Ha vuelto con el equipo y estará disponible mañana.”

Sobre Pedro Díaz, mostró prudencia pero optimismo ante una situación que se preveía peor. Todavía es temprano pero espera que el jugador pueda regresar en las próximas semanas:

“Pedro está bien dentro de la expectativa general. Todavía no sabemos la fecha de su regreso, pero no es para perderlo durante meses. Esperemos que en las próximas semanas pueda reintegrarse.”

En cuanto a Luis Felipe, el técnico subrayó la necesidad de ser prudentes:

“Que esté convocado no significa que esté perfecto para jugar. No ha tenido los entrenamientos adecuados para evitar una recaída. Es un jugador muy importante, pero hay que ser fríos y entender el proceso natural para su retorno.”

Un partido muy clave para las intenciones del Rayo

El conjunto franjirrojo afronta mañana un duelo muy intenso, con un rival que casi tiene el agua al cuello y cuya afición apretará desde el inicio. Sin embargo, lo hará con esa identidad, intensidad y ambición que tanto caracteriza al conjunto madrileño, buscando continuar con la dinámica positiva que ha caracterizado a la temporada.

El partido de mañana es crucial para los intereses del Rayo puesto que estos puntos son los que pueden decidir cosas al llegar a Mayo. No se puede especular ni confiar. Mañana el Real Oviedo saldrá a por todas a luchar con uñas y dientes, y si no se iguala en intensidad y cabeza, se puede escapar un partido muy importante de cara al futuro.